UN CANAL CON MUCHO FONDO
Una vez más el ciudadano español siente náuseas al oír a Mariano Rajoy en Sevilla pronunciar una de sus típicas soflamas sobre la honestidad del PP, justo a la hora en que, en Madrid, el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco no da abasto con la nueva banda de chorizos incluidos en la nueva operación Lezo , cuyo máximo representante es el que fuera presidente de la Comunidad de Madrid y mano derecha de Esperanza Aguirre, Ignacio González, ese mismo que incluso aspiró a suceder a Miguel Blesa al frente de Caja Madrid, cargo que, a la postre, recayó, como se sabe, en Rodrigo Rato, otro que nos salió rana, o más bien sapo, en honor a la ranas. Madrid, capital de la basura, lodazal del que no hay forma de salir, porque, a lo que parece, la corrupción está metida hasta la misma médula de la clase política que supo tomarse al pie de la letra el célebre lema de Zaplana, a quien no le dolieron prendas en afirmar que había ido a la política “a forrarse”. A lo